Trabajo basura

Opinión

En el mes de abril se registró un fuerte aumento del número de afiliados a la Seguridad Social, cerca de 200.000. Esto ha permitido romper la barrera psicológica de los 21 millones. Como no podía ser de otra manera, la ministra Elma Sáez ha lanzado las campanas al vuelo.

No cabe duda de que los datos del mercado laboral están siendo buenos, como sucede en todos los países desarrollados donde prácticamente se ha alcanzado el pleno empleo. En España estamos aún lejos de alcanzar este objetivo.

No hay una política económica y laboral ajustada a la revolución digital

El exceso de euforia es un error porque la situación del mercado laboral sigue siendo uno de nuestros principales problemas. Ya no se trata solo una cuestión de cifras sino de la calidad del empleo que se crea. Caer en el “burro grande ande como si no ande” es absurdo a estas alturas.

Los datos de abril ponen de manifiesto que la mitad del incremento de afiliados procede de la hostelería; y el 36% han sido ocupados por trabajadores extranjeros. Si nos fijamos en el tipo de contratos utilizados, es fácil comprobar que la precariedad laboral sigue siendo muy fuerte. Cierto que los contratos temporales han disminuido drásticamente, pero han crecido en la misma proporción los fijos discontinuos.

Es cierto que en los 3 últimos años se han creado 2 millones de empleos, pero el 55% han sido ocupado por trabajadores inmigrantes. Se trata de puestos con muy poco valor añadido y que explican la baja productividad que registra la economía española.

Como ha recordado el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, desde 2020 la renta per cápita ha crecido el 0,3% del PIB, frente al 2% de la UE. Dicho de otra manera, se crea mucho empleo, pero poca riqueza. Esto explica que los gastos de las administraciones públicas crezcan más que los ingresos, razón esta por la que nuestro país tenga una de las deudas mayores del mundo en términos absolutos y en relación con su PIB.

También explica en buena parte que a pesar del fuerte crecimiento de cotizantes a la Seguridad Social las cuotas recaudadas no sean suficientes para pagar las pensiones contributivas. El año pasado se produjo un “agujero” en el sistema público de pensiones de 56.000 millones, que equivale al 3,6% del PIB. Es el Estado quien está teniendo que pagar esta diferencia con más deuda y más impuestos.

Esto se debe a que las cuotas que se recaudan son muy bajas, porque provienen de salarios reducidos. Es lo que el líder histórico de CC.OO. Agustín Moreno llamó “trabajos basura” para referirse a los contratos temporales. Y fue otro dirigente del mismo sindicato, José María Fidalgo quien se atrevió a decir que necesitábamos “menos trabajo basura y más empleo cualificado”.

El problema de fondo es que no hay un proyecto de país ni en el gobierno ni en la oposición. Ni una política económica y laboral ajustada a la revolución digital que el mundo está viviendo.

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...